Aurelio S.Emeterio, Gaspar Llamazares y Daniel Martínez,

ampliar Francisco Espinosa, Gaspar Llamazares y Emilio Sales

El pasado viernes día 17 se celebró en el Centro Cívico/Biblioteca del Polígono de Toledo, un acto sobre la Represión franquista que, bajo el título “El silencio de las cunetas”, llenó el salón de actos del ateneo. Este acto lo organizó la Asamblea Local de Izquierda Unida y contó con la presencia de muchos ciudadanos y ciudadanas que quisieron asistir a esta jornada de divulgación.

Esta jornada estuvo presentada por Aurelio S. Emeterio, Concejal del Ayuntamiento de Toledo y Coordinador Local, e intervinieron Emilio Sales, Presidente del Foro por la Memoria de Toledo, Gaspar Llamazares, Diputado de IU en el Congreso de Diputados, Francisco Espinosa, Historiador y Catedrático en la Universidad de Sevilla y Daniel Martínez, Coordinador Regional de IU en Castilla-La Mancha.

Poco antes de finalizar el acto se recibió la noticia de la muerte de Florián García “Grande” uno de los más reconocidos Guerrilleros Antifranquistas, que se une a la reciente pérdida de Eulalio Barroso “Carrete”, para ellos y para todos los que lucharon contra el franquismo se les dedicó un caluroso aplauso como homenaje, reconocimiento y agradecimiento.

Intervención de Emilio Sales, presidente del Foro por la Memoria de Toledo

Buenas tardes.

Agradecemos la invitación que los compañeros y las compañeras de Izquierda Unida han cursado al Foro por la Memoria de Toledo para que participemos en este acto Republicano y Antifascista, acto que pretende difundir los valores que miles de españoles defendieron ante el golpe de estado y la posterior guerra civil.

No es la primera vez que coincidimos con los compañeros Aurelio, Daniel y Gaspar en convocatorias de esta naturaleza, recuerdo imborrable es la celebrada en el Teatro de Rojas sobre el Patio 42 del cementerio de esta ciudad. Sin embargo si es la primera ocasión en que coincidimos con Francisco Espinosa que pasa por ser uno de los más importantes historiadores e investigadores sobre la guerra civil y la represión franquista, sobre todo circunscrita a la zona andaluza occidental (Sevilla y Huelva) y Badajoz. Son varias las obras escritas por Espinosa, “MORIR, MATAR Y SOBREVIVIR” junto a Casanova, Mir y Moreno Gómez, “CONTRA EL OLVIDO”, “LA GUERRA CIVIL EN HUELVA”, “LA JUSTICIA DE QUEIPO” y “LA COLUMNA DE LA MUERTE”. De esta última me gustaría glosar su importancia para la zona donde resido, Talavera. Esta columna fue la que atravesó la provincia de Toledo entrando el 3 de septiembre en la llamada ciudad de la cerámica y, curiosamente, en la edición de este libro aparece en su portada una fotografía del asesinato de campesinos en las murallas de la calle Carnicerías y que sirvió a la propaganda franquista para declarar que habían sido las “hordas marxistas” cuando el vil crimen fue cometido por las tropas rebeldes.

Pero a mi me toca hacer una breve resumen de como está la situación en la provincia de Toledo y en la Región. No estamos en el mejor de los escenarios deseables pero tampoco desentona de lo que sucede en el resto del país que, salvo honrosas excepciones y sin que tampoco sea una situación mínimamente buena, es de una absoluta indiferencia por parte de las administraciones y de los responsables políticos. Por ello deberíamos decir que hay una absoluta falta de voluntad política para resolver la cuestión.

En CLM tenemos, a modo de ejemplo, reacciones de los máximos responsables autonómicos como la de “estas son cosas del pasado y yo soy un presidente del futuro” pero que no tiene empacho para hacerse la foto en un cambio de nombres de calles hace unas fechas, eso sí los asistentes a los que se les daba el homenaje eran Antonio López y Francisco Nieva. O responsables municipales que declaran “estar hasta los mismísimos de la Memoria Histórica” pero que mantienen el Colegio Público con el nombre del falangista que se sublevó a tiros contra sus paisanos. Es cierto que en algunas localices donde IU tiene presencia en el equipo de gobierno e están consiguiendo avances, caso de la capital Toledo con las fosas del cementerio y en especial con el Patio 42, la retirada de la medalla a Franco o del escudo de la puerta del Ayuntamiento o en la localidad conquense de Mota del Cuervo donde el acuerdo plenario de retirada de una cruz con simbología fascista ha dejado a las claras la postura del PP o del obispo de Cuenca y la atentado al domicilio del Alcalde.En este paisaje y con este paisanaje nos movemos.

Y es que mientras España da ejemplos de defensa de los Derechos Humanos (eso si fuera de nuestras fronteras) cuando llegamos al espacio interior se olvida, mientras soldados españoles y profesionales exhuman fosas comunes, es España se considera que es un asunto privado, como si un particular fuera el que tiene que intervenir para el esclarecimiento de un crimen, en este caso de lesa humanidad que no prescriben. Claro que a lo mejor habría que preguntarse cual es el tapón que impide aclarar lo sucedido y poner en manos de la justicia a los responsables. Yo tengo idea de uno y de un momento histórico que impide que se sepa la VERDAD, se haga JUSTICIA y se RERARE a las victimas. A lo mejor muchos de los presentes están en el mismo pensamiento y en la misma línea. Pero voy a dar un dato para la reflexión. En este país no ha habido una ruptura con el régimen franquista, en las estructuras del poder (banca, iglesia, ejército, policía) se han mantenido los mismos que se sublevaron contra la legalidad y sus hijos y nietos han quedado para salvaguardar sus privilegios. La nieta de D. Juan Negrín comentaba no hace muchas fechas que “España es el único país que no ha renegado de su fascismo” y es una verdad palpable. Les cuento esto por que en la última pantomima en la Asamblea de Madrid para la investigación del caso de los llamados espías aparecieron ciertos personajes que hoy en día son los encargados por el gobierno de aspectos de seguridad. Sería interesante conocer la historia de alguno de estos expolicias, nos podríamos llevar alguna sorpresa.

Pero la represión no fue solamente (con ser la parte más trágica) los desparecidos y asesinados. La represión franquista, y aquí tenemos un estudioso del tema, llegó mucho más lejos y en muchos más aspectos.

Fue el exilio, también el interior. Las miles de personas expulsadas de sus pueblos y extrañadas de sus lugares de residencia. Fueron esos miles que atravesaron la frontera De Los Pirineos, pero también los miles que abandonaron sus pueblos con una mano delante y otra detrás.

Fue los deportados a campos de concentración. También a los campos interiores y, como no, a los campos de exterminio nazis y que ningún gobierno ha reparado. Bueno no es así, el gobierno de la República francesa (un gobierno de la derecha francesa encabezado por Chirac) indemniza a aquellos descendientes menores de edad (21 años) cuando asesinaron a sus padres.

Fue la Guerrilla Antifranquista que sigue sin ser reconocida como debiera, fueron los enlaces y puntos de apoyo que colaboraron con aquellos luchadores y que en muchos casos sufrieron la cárcel, la tortura y la muerte.

Fueron las incautaciones, el expolio, el robo sistemático de bienes, patrimonio y caudales que debieron ser entregados a los golpistas y que, aun hoy, el Estado se niega a resarcir con la complicidad de los llamados dos grandes partidos. Así como los que sufrieron el trabajo esclavo en Batallones Disciplinarios trabajando para empresas y para la iglesia, las que no han resarcido a aquellos de los beneficios y patrimonio que crearon para ellas.

Fueron los represaliados, los expulsados de sus trabajos, los jueces, los maestros, los defensores de la legalidad que aun hoy no son reconocidos como se debiera.

Fue mucho más, pero hay una parte de la población que sufrió la represión y que a la que no se ha hecho justicia, LAS MUJERES. Si la mayoría de los asesinados fueron hombres, si la mayoría de los encarcelados fueron hombres, las mujeres fueron las que sufrieron una represión más sibilina, más sutil, más callada. Hace unos meses estuve en Asturias, allí tuve el inmenso honor de departir un buen rato con un gran luchador y que seguro Gaspar conocerá, FELIPE MATARRANZ. Él Guerrillero mítico, luchador infatigable, con años de cárcel y torturas (las cuales obvio decir pero que todos imaginan).Bien pues el Camarada Matarranz con sus 93 años, no deja nunca de decir que las verdaderas heroínas fueron las mujeres, sus compañeras. Ellas que habían perdido a sus padres, hijos, hermanos, compañeros, etc… tuvieron que sacar adelante a sus familiares, en algunos casos trabajando a cambio de nada o casi nada, para los mismos que habían matado a sus seres queridos, colaborando con los Guerrilleros, sacando de donde no había para sobrevivir. Desde aquí mi sentido homenaje a todas esas mujeres.

En fin, no me alargo más, es indudable que seguimos en deuda con todos aquellos, hombres y mujeres, que lucharon por la libertad, por la legalidad, por la dignidad. Cuando algunos comentan que estamos dignificando a personas creo que están equivocados. Ellos, Ellas, nunca perdieron la dignidad, quizás sería más adecuado decir que estamos luchando por recuperar la nuestra, perdida tras muchas renuncias y componendas.

Un saludo.